Revisión de la correa de distribución

 Continuamos con nuestra serie de revisiones que puedes hacer tú mismo en tu coche sin necesidad de acudir al taller. En esta ocasión hablaremos sobre la revisión de la correa de distribución.

La correa de distribución es una pieza vital del motor de tu coche, ya que es la encargada de sincronizar el movimiento del cigüeñal y del árbol de levas, lo que permite que las válvulas se abran y cierren en el momento adecuado. Si la correa de distribución se rompe o se desgasta demasiado, puede causar daños graves en el motor, lo que puede resultar en costosas reparaciones.

Por lo tanto, es importante verificar regularmente el estado de la correa de distribución y su tensión para evitar problemas mayores. Si bien esta tarea puede parecer un poco complicada, con las herramientas adecuadas y un poco de conocimiento puedes realizarla tú mismo.

Antes de empezar, es importante que consultes el manual del propietario de tu coche para conocer el intervalo de cambio recomendado por el fabricante. La mayoría de los fabricantes recomiendan cambiar la correa de distribución cada 60,000 a 100,000 kilómetros, pero puede variar según el modelo y el año de fabricación.

Para revisar la correa de distribución, sigue estos pasos:



Localiza la correa de distribución: La correa de distribución se encuentra en la parte delantera del motor, debajo de la tapa protectora de la correa de distribución. Para acceder a ella, es posible que debas retirar algunas piezas del motor, como el ventilador, la correa del alternador o la tapa del motor.

Inspecciona visualmente la correa: Una vez que tengas acceso a la correa de distribución, inspecciónala visualmente para buscar signos de desgaste o roturas. Presta especial atención a las áreas donde la correa se encuentra con las poleas, ya que aquí es donde se produce la mayor tensión.

Verifica la tensión de la correa: Para verificar la tensión de la correa, usa un medidor de tensión de correa. Este instrumento se coloca en la correa de distribución y te permite medir la tensión de la correa para asegurarte de que esté en el rango recomendado por el fabricante. Si la correa está demasiado floja o demasiado tensa, deberás ajustarla o reemplazarla.



Verifica el estado de las poleas: Además de la correa de distribución, también es importante verificar el estado de las poleas. Asegúrate de que no estén desgastadas o dañadas, ya que esto puede afectar la vida útil de la correa de distribución.

Si durante la revisión de la correa de distribución encuentras alguna anomalía o no te sientes seguro realizando esta tarea, es mejor acudir a un profesional calificado. Un mecánico con experiencia sabrá cómo revisar y cambiar la correa de distribución de manera segura y efectiva.